Moricandia arvensis, (L.) DC.

S. Castroviejo, C. Aedo, C. Gomez Campo, M. Lainz, P. Montserrat, R. Morales, F. Munoz Garmendia, G. Nieto Feliner, E. Rico, S. Talavera & L. Villar, 1993, Flora Iberica / Vol. IV: Cruciferae - Monotropaceae, Madrid: Real Jardín Botanico, CSIC : 339

1. M. arvensis (L.) DC. , Syst. Nat. 2: 626 (1821)

Brassica arvensis L. , Mant. Pl. 1: 95 (1767) [basión.]

B. moricandia Boiss. , Voy. Bot. Espagne 2: 34 (1839), nom. illeg.

Ind. loc.: “Habitat in Europae australis arvis humentibus”

Ic.: Lám. 125

[arvénsis]

Planta anual o perenne. Tallos de hasta 65 cm, erectos, ramosos y leñosos en la base. Hojas basales no claramente arrosetadas, obovadas, obtusas en el ápice, con base ± acorazonada; las caulinares, de crenadas a enteras, amplexicaules, con ápice de agudo a obtuso. Racimo de 10-20 flores, con eje no flexuoso. Sépalos medianos lineares, oblongos, obtusos; los laterales, oblongo-lanceolados, netamente gibosos en la base. Pétalos 21-29 mm, lilas, más raramente blancos. Frutos 30-60 × 2-3 mm, rectos, erectos, comprimidos lateralmente. Semillas c. 1,2 × 0,8 mm biseriadas, elipsoidales, aplanadas, ápteras, pardas. 2 n = 28.

En cultivos, cunetas y lugares alterados, sobre substratos básicos, yesosos o calizos; 0-700 m. III-VI(X). S de Europa y NW de África. C, S y E de la Península, Baleares. Esp.: A Ab Al B Co Cu Ge Gr Gu Hu J L Lo M PM[Mll] Mu Se So T To V Z. Port.: BB. N.v.: collejón; cat.: colletxó.

Sus hojas se han consumido a veces de igual manera que las de Conringia orientalis .

Observaciones.– En ocasiones se han descrito variedades de flor blanca; pero la falta de pigmentación floral aparece con facilidad en situaciones de estrés (hídrico, térmico o de ambos tipos), según se ha podido comprobar experimentalmente.